Bien se ha discutido la semana pasada, que como parte de su restructura global, Citigroup tiene intención de salir de los negocios de banca de consumo y pequeñas empresas. Sin embargo, seguirá operando su negocio de clientes institucionales o banca corporativa mayorista, que incluye los negocios de banca de inversión y corporativa, mercados de capitales, banca privada y banca transaccional.
Mirando el pasado, en el 2001, La adquisición de Citi por 12,5 millones de dólares fue la más grande de México en ese momento y se produjo después de que una crisis económica devastadora en el sector bancario del país a mediados de la década de 1990.
En ese entonces, la participación de mercado de Banamex era superior a 20% y la de su siguiente competidor, Banorte, de menos de la mitad. Ahora, su participación es cerca de 10%, colocándolo según American Bank en una valuación de entre 12 mil 500 y 15 mil 500 millones de dólares. JP Morgan, por el contrario, ve un precio de venta potencial entre $5 mil - 8 mil 500 millones de dólares, limitando las opciones de los otros bancos que tendrían ese poder adquisitivo.
Analistas de Credit Suisse predicen que tanto los grandes bancos mexicanos como los brasileños podrían ser candidatos potenciales para adquirir los activos.
Una posible alianza con BBVA probablemente enfrentaría problemas regulatorios, ya que su participación de mercado superaría el 35% por ciento. Volviéndolo un poder sustancial en el mercado. (LFCE articulo 54 sección II)
Santander por su lado, esta posicionado como uno de los compradores favoritos debido a su retorno sobre inversión (ROI por sus siglas en ingles) por arriba del 5%.
Independientemente de los problemas regulatorios, veo a Santander y a Banorte como futuros adquisicioncitas. Según los datos de la CNBV, ambos obtendrían una mayor participación en el mercado que BBVA (22.7%). Banorte contaría con 23.5% y Santander con 27.3%.
Por otro lado, el banco digital Nubank en un comunicado oficial, descarto tener interés en adquirir la banca de consumo de Citigroup en México.
Banco Itaú por su parte, estaba interesado en México (HSBC 2016) , pero los múltiplos nunca fueron atractivos. Por lo pronto han reservado sus comentarios respecto al caso.
Otros posibles compradores podrían provenir de Canadá, donde los seis más grandes bancos tienen exceso de efectivo. Un ejemplo podría ser Bank of Nova Scotia que ya tiene un negocio considerable en México y cuenta con uno de los ROI mas grandes del mercado.